La Infanta Elena tras los pasos de la Reina Sofía: el nexo de unión entre dos bandos separados
A pocas semanas de un nuevo aniversario de la proclamación de Felipe VI -ocho años ya-, la situación de la familia del Rey ha cambiado mucho, especialmente en los últimos tiempos. Sin embargo, si hay dos figuras que prácticamente no han sufrido cambios estas son las de la Reina Sofía y la Infanta Elena. Esto no significa que hayan estado exentas de algunas polémicas, sino que, en realidad, su posición dentro de la institución -en el caso de doña Sofía- o de la familia -en lo que se refiere a la Infanta Elena-, no se ha visto especialmente afectada.
La Reina Sofía con la Infanta Elena. / Gtres
A día de hoy, la madre de Felipe VI continúa volcada en sus compromisos privados, la mayoría de ellos solidarios y centrada en las actividades de la Casa de S.M. el Rey. Dado que tanto la Princesa Leonor y la Infanta Sofía aún no tienen un papel destacado dentro de la agenda, los compromisos oficiales se reparten entre el Rey, la Reina Letizia y doña Sofía, esta última, como es lógico, en menor medida. No obstante, casi todas las semanas doña Sofía participa en algún acto.
En el caso de la Infanta Elena, ya no forma parte como tal de la agenda de la Casa de S.M. el Rey, pero ello no es óbice para que, puntualmente, participe en algún acto. No hay que olvidar que su situación es diferente a la de su hermana y que ella no ha estado envuelta en una polémica tan sonada como la exduquesa de Palma, a raíz del Caso Nóos primero y de su inesperada separación después, cuando se publicaron las fotografías de Iñaki Urdangarin paseando de la mano de Ainhoa Armentia en una playa cercana a Bidart.
La Infanta Elena hace una reverencia a su madre. / Gtres
La Infanta Elena ha sido siempre una de las figuras más conciliadoras de la familia del Rey, una suerte de comodín que tan pronto participaba en un acto oficial por petición del Rey como ejercía de vínculo entre las diferentes ramas de la familia. Un detalle que el pasado verano quedó especialmente reflejado, cuando la duquesa de Lugo dividió sus vacaciones entre Palma de Mallorca, Bidart y Abu Dabi fundamentalmente. Una forma de poder estar con la Reina Sofía, el Rey Juan Carlos y la Infanta Cristina, en un momento clave para ella.
El Rey Juan Carlos con la Infanta Elena y doña Sofía. / Gtres
La duquesa de Lugo ha ido en los últimos tiempos tomando el relevo de su madre, en un papel tan importante como es ejercer de ‘unión’ entre la familia. Un rol que, especialmente en el año 2018, tenía a la Reina Sofía como protagonista. No es posible olvidar la fotografía del ochenta cumpleaños de la madre de Felipe VI, que consiguió juntar a toda la familia -menos Urdangarin-, en un momento crítico. Sin embargo, la reciente imagen del Rey Juan Carlos rodeado por sus hijas y varios de sus nietos evidencia una nueva realidad.
Es cierto que tanto doña Elena como doña Cristina han visitado varias veces a su padre en Emiratos, pero siempre ha sido la duquesa de Lugo la más próxima al anterior monarca, lo que la convierte en el nexo de unión.
La Infanta Elena en un reciente viaje a Grecia. / Gtres
Estas fotografías que se hicieron públicas al tiempo de la esperada reaparición de la Princesa Leonor en sus vacaciones en España y que para muchos han sido una suerte de ‘boicot’ a la heredera, evidencian que el regreso de don Juan Carlos estaría cada vez más cerca y que el padre de Felipe VI no tiene intención en ningún caso de esconderse, más aún ahora que en España se han archivado todas las investigaciones.
En las imágenes llamó la atención la ausencia, no solo del hijo mayor de la Infanta Elena sino, muy especialmente también, de la Reina Sofía. A pesar de que se ha comentado a lo largo del tiempo que don Juan Carlos lleva en Abu Dabi que habla a diario con la Reina, no ha habido constancia de ninguna visita de doña Sofía, como tampoco del Rey.
La Reina Sofía y Infanta Elena durante la proclamación de don Felipe. / Gtres
Una situación que, por una parte, resulta llamativa, pero por otra es más que lógica. Como miembro de la familia real en activo, doña Sofía se ha mantenido al lado de los Reyes en este sentido. Algo que no hizo, por ejemplo, hace algunos años, cuando estalló el escándalo del Caso Nóos y no dudó en visitar en numerosas ocasiones a los exduques de Palma, poniendo por delante de la institución la faceta familiar. Sin embargo, en el momento en el que salió la sentencia, la familia quedó dividida en dos: por un lado los Reyes y sus hijas y, por otro, el resto.
A día de hoy, el tema de Urdangarin solo está presente en lo relacionado con la separación de doña Cristina, pero los dos bandos siguen siendo una constante. Dos bandos entre los que solo la Infanta Elena puede mediar de manera libre. Es la única que se mantiene completamente libre de polémicas y que mantiene relación con todos. Un puente entre dos bandos que, en el pasado, ejercía la propia doña Sofía, cada vez más alejada del Rey Juan Carlos y su entorno directo.